Adiós

25...
mítico día
había ideado
una lacrimógena carta de despedida
pero, sinceramente,
ya no tengo ganas
no más pensamientos
no más palabras
sólo una, la última: adiós.


Es un adiós con equipaje,
trae consigo:
Perdón
si te causé daño,
no fue mi intención;
si me causaste daño,
ya lo olvidé.
Deseos
de que finalmente
encuentres la felicidad
y te permitas aceptarla;
de que finalmente
sanen mis heridas
y encuentre el camino
hacia mi vida.


Muy escondido
en el bolsillo trasero
hay un paquete más,
viene de contrabando.
Son mis últimos sentimientos hacia vos,
será tu decisión
si los evitás,
si los denunciás
o si los recibís.


Adiós
no merezco tu desprecio
pero lo tengo
no merecés mis lágrimas
pero caen por vos.
Enero - 2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario