Prisionera del miedo


Temo, no estoy segura de nada
ni siquiera de mí.
Sólo se que no quiero lastimarte.
Pero a la vez…
Estás siempre presente,
tus ojos mirándome
con tanta pasión
desde el fondo de mi pecho.
Y por primera vez
no temo mirar
para interrogar
qué está pasando.

Al verte otra vez
me convencí
de que no era otro
de mis sueños;
sino que esta vez
el que me amaba
eras vos,
no mi imaginación
quien tantas veces
me jugó
una de sus peores bromas.

Agradezco infinitamente a Dios
y aprendí por fin
que de nada sirve
tratar de entenderlo,
sino sólo aceptar

Su sabio destino.

Todo


Lo intenté todo, brindarte más, pedirte menos
y a tu modo.
Decir las cosas con cuidado y con arrojos.
Quise adorarte, quise cuidarte.

Lo intenté todo, hablar contigo
y entenderte sin enojos,
ser tu guarida, tu silencio y tu cerrojo.
Quise quererte y protegerte

Pero no más, me grita el alma enfurecida de aguantar.
Estar contigo es despedida sin final
Te vas y no te vas
Te das y no te das
Lo intenté todo...

Lo intenté todo
Pero he perdido ya ese miedo de estar solo.
Para perder lo que uno es, hay que estar loco.
Yo no estoy loco...

Pero no más, me grita el alma enfurecida de aguantar
Estar contigo es despedida sin final
Te das y no te das
Te vas y no te vas

Pero no más, me grita el alma enfurecida de aguantar
Estar contigo es despedida sin final
Te vas y no te vas
Te das y no te das
Lo intente todo...

Pero no más, me grita el alma enfurecida de aguantar
Estar contigo es despedida sin final
Te vas y no te vas
Te das y no te das
Lo intente todo...

Alejandro Fernandez

¿Sólo aburrimiento?


Se nota tu ausencia
falta incentivo, vida.
Las horas se suceden
lentas, interminables.
Preparar café o prender un cigarrillo
lleva inevitablemente
a confirmar que necesito
un compinche
más que ninguna otra cosa.

Te has hecho querer, y
lo que empezó como broma
ha finalizado en esto
que no sé qué es.
Pienso en lo que pasó aquí,
compruebo que ya no más
y una mueca de tristeza
se dibuja en mi rostro.

06/VI/1995


Canción de pobres corazones



Esta noche en medio del café
te pienso solitaria caminando donde estés
pobres corazones empapados
muriendo mutilados, desgarrándose la piel

Se perderán, se perderán, se perderán.
Ahora, te extraño, ahora, que duele
Ahora, lo que tengo que pagar,
me asusta, no entiendo.
Ahora, que hablo.
Ahora, me duele tanto amor.
Ahora, y lo tengo que aguantar.
Ahora, te extraño.

Hoy te vi cruzando Santa Fe
Te vi en cada vidriera, en cada luz, cada mujer
Esa si la pongo en el papel
morí en un atentado de pasión e insensatez.

Se perderán, se perderán, se perderán.
Ahora, te extraño, ahora, que duele.
Ahora, lo que tengo que pagar, me asusta, me duele.
Ahora
Ahora, me duele tanto amor.
Ahora, y lo tengo que aguantar.
Ahora, que extraño.
Ahora que hago.. ahora..

Ricardo Montaner

Jardinera del corazón


Cuando arrancás una planta
se marchita y finalmente muere.
Si te arranco de mi corazón,
¿morirás o continuará prendido a él,
con tus raíces tan profundas?

Mas si queda una mínima parte,
espera hasta la primavera
y vuelve a crecer.
Algo quedó dentro mío
y por eso renaciste.

Necesito saber qué hacer:
¿Quemo tus raíces hasta el fin,
o las riego, les pongo abono
para que crezcas más
y ocupes todo el bosque?

30/V/1995


Qué voy a hacer con mi amor



Le bajé las estrellas de un solo golpe
tal vez ese fue mi error.
Ofrecí cada día y cada noche
el alma y el corazón
Pero no le bastó
no fue suficiente
no quizó quererme
como la quise yo.

Qué voy a hacer con todo este amor
Que no cabe en mi pecho
Que me cala los huesos
Que se ahoga en este mar de dolor
Que me quema la carne
Que me hierve la sangre
Que me está partiendo en dos la razón
Qué voy a hacer sin su amor
Qué voy a hacer con mi amor

Se alejó de mi vida de un solo golpe
se fue sin decirme adiós
Me rompió la sonrisa, las ilusiones
el alma y el corazón
Le dí todo mi amor
y no fue suficiente
no quizo quererme
como la quise yo.

Qué voy a hacer con todo este amor
Que no cabe en mi pecho
Que me cala los huesos
Que se ahoga en este mar de dolor
Que me quema la carne
Que me hierve la sangre
Que me está partiendo en dos la razón
Que no cabe en mi pecho
Que me cala los huesos
Que se ahoga en este mar de dolor
Que me quema la carne
Que me hierve la sangre
Que me está partiendo en dos la razón
Qué voy a hacer sin su amor
Qué voy a hacer con mi amor, con mi amor

Alejandro Fernández

Naturalmente imposible


No puedes pedirle
al deseo de amar
que no se enamore
del mismo amor.

Como tampoco puedes
decirle a la Luna
que pase el día
con el Sol.

O al aceite
que una sus moléculas
con aquellas tan diferentes
como las del agua.

Por eso es que te digo:
No me pidas
que no te ame

y mucho menos que te olvide.

10-III-1996

Sin miedo a nada


Me muero por suplicarte
Que no te vayas, mi vida,
Me muero por escucharte
Decir las cosas que nunca digas,
Mas me callo y te marchas,
Mantengo la esperanza
De ser capaz algún día
De no esconder las heridas
Que me duelen al pensar
Que te voy queriendo cada día un poco más.
Cuanto tiempo vamos a esperar

Me muero por abrazarte
Y que me abraces tan fuerte,
Me muero por divertirte
Y que me beses cuando
Despierte acomodada en tu pecho,
Hasta que el sol aparezca.
Me voy perdiendo en tu aroma,
Me voy perdiendo en tus labios que se acercan
Susurrando palabras que llegan a este pobre corazón,
Voy sintiendo el fuego en mi interior.

Me muero por conocerte,
Saber que es lo piensas,
Abrir todas tus puertas
Y vencer esas tormentas que nos quieran abatir,
Centrar en tus ojos mi mirada,
Cantar contigo al alba
Besarnos hasta desgastarnos nuestros labios
Y ver en tu rostro cada día
Crecer esa semilla,
Crear, soñar,dejar todo surgir,
Apartando el miedo a sufrir.

 Me muero por explicarte
Lo que pasa por mi mente,
Me muero por intrigarte
Y seguir siendo capaz de sorprenderte,
Sentir cada día
Ese flechazo al verte,
Que mas dará lo que digan
Que mas dará lo que piensen
Si estoy loca es cosa mía
Y ahora vuelvo a mirar el mundo a mi favor,
Vuelvo a ver brillar la luz del sol.

Alex Ubago y Amaia Montero

Razones para un no amor


No estoy enamorada.
¿Por qué?
Aquello de amor a primera vista
quedó para las novelas
y mis expectativas aún no han sido colmadas.

Debería buscarte,
cerrar los ojos y continuar
o “filosofar” hasta
encontrar la causa
de la ausencia de ese fuego interior.

Muchas dudas para
tan poco tiempo.
Los recuerdos siguen ahí
y algo de indiferencia
- o de desinterés –

se asoma por la ventana.

11-V-1995

Para vivir


Que difícil es refugiarse del dolor
Cuando se muere cada noche de desamor
Que difícil es dibujar ausencias de ti
Soñando con las sombras de ese tiempo feliz
Que difícil es escapar a mi soledad
Y a tantas ilusiones que no volverán
Sólo huellas del ayer sólo trazos de un querer
Al verte tan lejana y fría se muere el alma mía

Para olvidar me falta tiempo
Para llorar me sobra vida
Y no habrá dolor más grande
Que no volverte a ver
Para esperar me falta fuerza
Para intentar me sobra fe
Y se escapa de mis manos
La mujer que tanto amo
Para volver me sobran ganas
Para aceptar me falta el alma
Y se escapa entre las sombras
Quien me diera su luz

Me queda tanto para darte
Mi corazón, mi juventud
Pero a pesar de lo que tengo
Para vivir me faltas tú

Que difícil es aceptar que ya no estarás
Y quedo en el desierto de mi soledad
Sólo huellas del ayer, sólo trazos de un querer
Al verte tan lejana y fría se muere el alma mía

Alejandro Fernández





Rimas


Tengo tanto miedo
que si no supiera que estás,
que puedo contar con vos
te iría a buscar.

Mis ojos se humedecen
porque quitaste la cadena
que impedía enamorarme.
Mi corazón te lo agradece.

Sé que no son
todos iguales,
pero aún ando
padeciendo sus males.

Las cosquillas me invaden
de principio a fin,
despiertan mis nervios
porque a vos se abren.

Acostada en mi cama,
una lágrima asoma;
intenta no caer
pero la lucha abandona.

No cesa mi mente
de pensar en ti.
Mis sentimientos te buscan

y cruzan el puente.

30-IV-1995

Si tú eres mi hombre


Preguntale a la noche,
Si ha visto alguna vez.
Dos pieles abrazándose,
En una misma piel
tu cuerpo es casi mío,
mi cuerpo es casi de él.
Dos islas que se buscan
Entre la niebla de las dos.

Si tú eres mi hombre,
y yo tu mujer.
Donde quiera que estés
amor contigo estaré.

Porque el sol puede mentir.
Porque el mar puede engañar.
Todo puede ser mentira,
Pero nosotros somos verdad.

Si tú eres mi hombre,
y yo tu mujer.
Donde quiera que estés
amor contigo estaré.

Lejana o cercana tú lo quieras o no.
No hay muerte en el mundo que
Consiga matar, una historia de amor.
La vida nos oprime,
nos oprime el corazón.
Mi estrella es sola tuya,
tu estrella sólo yo.

Si tú eres mi hombre,
y yo tu mujer.
Donde quiera que estés
amor contigo estaré.
Lejana o cercana tú lo quieras o no.
No hay muerte en el mundo que
Consiga matar, una historia de amor.

Ángela Carrasco

Giro de 180º


Comprendí el sentido de muchas palabras:
amor, felicidad, abrazo, plenitud.
Y olvidé el de muchas otras:
tristeza, llanto, soledad, angustia.

A tu lado aprendí a vivir el amor
y supe que si no te tengo
nada tiene sentido para mí.

Descubrí que es más gratificante
darte todo de mí
que esperar a recibirlo.
Sólo porque te amo…

Nunca olvidaré cuanto te debo:
mis sonrisas, mis ganas de vivir,

el agradecer a Dios el nuevo día.

11-IV-1994

No reconozco




No reconozco a ese tipo que mira asustado 
desde el espejo de las escaleras mecánicas. 
Allá donde todos miran buscando, qué sé yo, 
tal vez una sumergida Atlántida 
o un mechón rebelde, 
algo perdido entre los recuerdos o los dientes. 
Será simplemente que no estás a mi lado. 

Salgo a la calle después de comprar viejos discos 
que me recuerden, como no, a ti. 
La distancia y el amor tienen esa costumbre 
de mezclar el placer con las ganas de sufrir. 
Salgo a la calle y enciendo un cigarro 
-no pude dejarlo, ya sabes- 
pensando que tal vez el humo se ha de llevar 
mis plegarias hasta ti. 

Ya ves que la vida tiene el mal gusto 
de seguir su curso sin contar conmigo. 
Todo parece un decorado triste y obsceno 
porque no estás tú. 
Ya ves que el mundo no tiene la delicadeza 
de pedir perdón por echarnos a un lado 
de malas maneras para seguir su camino. 
Todo parece un teatro mal interpretado, 
amarillo, cuarteado 
porque no estás tú, 
porque no están todas las noches de marzo 
que yo te he robado nadando en tu ropa, 
todos lo demonios buenos, 
todos los deseos 
naciendo en tu boca. 

Luchando con las arañas grises del olvido, 
como el hombre menguante en un inmenso Madrid, 
busco mi coche perdido. Lo encuentro hundiéndose 
como el vapor que abandonó Lord Jim. 
Y por casualidad paso por la calle que te vio llorar. 
Trampas tiene la ciudad y ¿quién quiere escapar? 

Llego a mi casa cansado, vencido y Penélope –es lista– 
esta vez tampoco me esperó. 
Pongo la tele; pongo la colada y nada 
me hace escapar de tu recuerdo, del dolor. 
Siento que muero y fuera en la calle ni París ni aguaceros. 
Será el invierno, la gripe, el momento 
o que no estás a mi lado. 

Pero, aunque la vida tenga el mal gusto 
de seguir su curso sin contar contigo, 
yo se que un día será soleado y tranquilo 
porque estarás tú. 
Aunque el planeta no tenga la delicadeza 
de pedir perdón por echarnos a un lado 
de malas maneras para seguir su camino, 
yo sé que un día todo será diferente, 
feliz simplemente, 
porque estarás tú, 
porque estarán todas las noches de marzo 
que yo te he robado frente a tu portal, 
todas las nuevas promesas 
que escriben la senda a Nunca Jamás, 
todos los sueños y el tacto 
leve de tus manos buscando en mi ropa, 
todos los demonios buenos, 
todos los deseos naciendo en tu boca

Ismael Serrano


Reconocer


En este momento mi corazón late con tristeza
y mis ojos no son más que dos recipientes para las lágrimas
porque estoy a punto de hacer lo que tantas veces:
darte la razón. ¿En qué?
En que jamás tendré a alguien como vos cerca de mí
y que es muy difícil que alguien me ame como vos lo hiciste.

Presiento algo funesto, que fui engañada
o que estoy a punto de serlo.
No quiero volver con el caballo cansado;
sería una grosería de mi parte…
Es horrible esta sensación de que me equivoqué,
de que otra vez se va todo a pique.

Pienso en vos, ahora,
en la última vez que nos vimos, en lo mal que te traté,
con razón o sin ella, no me comporté bien.
Me acuerdo de lo que me dijiste una vez:
“Podrás encontrar mejores o peores que yo,
pero no iguales”

Ahora vengo a darme cuenta de que decías la verdad;
ahora cuando tal vez sea demasiado tarde
y con esta amargura en el alma
que me hace escribir de madrugada.
Porque siempre fuiste una isla en mi naufragio,

mucho más hoy que me estoy ahogando.

01-X-1995

No me compares


Ahora que crujen las patas de la mecedora
y hay nieve en el televisor
Ahora que llueve en la sala
y se apagan las velas
de un cielo que me iluminó
Ahora que corren los lentos
derramando trova y el mundo,
ring, ring, despertó
Ahora que truena un silencio feroz
ahora nos entra la tos.

Ahora que hallamos el tiempo
podemos mirarnos detrás del rencor
Ahora te enseño de dónde vengo
y las piezas rotas del motor
Ahora que encuentro mi puerto
ahora me encuentro tu duda feroz
Ahora te enseño de dónde vengo
y de qué tengo hecho el corazón.

Vengo del aire
Que te secaba a ti la piel, mi amor
Yo soy la calle,
donde te lo encontraste a él
No me compares
bajé a la tierra en un pincel por ti
imperdonable,
que yo no me parezco a él…
Ni a él, ni a nadie…

 Ahora que saltan los gatos
buscando las sobras,
maúllas la triste canción
Ahora que tú te has quedao sin palabras
comparas, comparas,
con tanta pasión.
 Ahora podemos mirarnos
sin miedo al reflejo en el retrovisor
Ahora te enseño de dónde vengo
y las heridas que me dejó el amor

Ahora no quiero aspavientos
Tan sólo una charla tranquila entre nos.
Si quieres te cuento por qué te quiero
y si quieres cuento por qué no.

Vengo del aire
que te secaba a ti la piel, mi amor.
Soy de la calle
donde te lo encontraste a él.
No me compares
bajé a la tierra en un pincel por ti,
imperdonable,
que yo no me parezco a él…
Ni a él, ni a nadie…

Que alguien me seque de tu piel mi amor
que nos desclaven
y que te borren de mi sien
Que no me hables
que alguien me seque de tu piel, mi amor
que nos desclaven
yo soy tu alma, tú eres mi aire..

Que nos separen,
si es que pueden
que nos separen,
que lo intenten
Que nos separen,
que lo intenten
yo soy tu alma y tu mi suerte
Que nos separen,
si es que pueden
que nos desclaven,
que lo intenten
Que nos separen,
que lo intenten
yo soy tu alma y tu mi suerte...

Alejandro Sanz







¿Qué es el amor?


¿Tenerlo sobre mi cuerpo
mirándome con sus ojos
llenos de pasión?
¿Una velada compartida,
cenado, cantando
y tomando mate?
¿Sentir la dulzura
de sus besos,
la graciosa ternura
de sus abrazos?

¿O es sólo pensar en él,
ansiar verlo
a cada instante?
¿Sufrir cada minuto
de su ausencia?
¿Sentir que, al irse,
se lleva todo,
hasta mi amor por la vida
y mis eternas y secas lágrimas?

¿O es todo eso junto?

10-V-1996